Cuando Dennis Cauchon empezó a notar un fuerte descenso de las muertes por sobredosis de drogas en el estado estadounidense de Ohio en otoño de 2023, estaba convencido de que había algo mal en los datos.
Ohio fue uno de los primeros lugares afectados por la crisis del fentanilo en Estados Unidos a partir de 2015. Entre 2016 y 2023, el estado registró una media de 4.500 muertes por sobredosis cada año, en gran parte causadas por este opioide sintético.
Pero durante el último trimestre de 2023, las muertes por sobredosis cayeron un 25% y siguieron descendiendo durante los tres primeros meses de 2024, según los datos oficiales analizados por Couchon.
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El descenso de las muertes por sobredosis en Ohio puede ser parte de una tendencia más amplia a nivel nacional. En 2023, hubo 107.543 muertes por sobredosis de drogas en Estados Unidos, lo que representa una caída del 3% con respecto a las 111.029 muertes estimadas en 2022, según datos preliminares publicados en mayo por los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (Centers for Desease Control, CDC).
Aunque solo supone una diferencia de poco menos de 3.500 muertes, fue el primer descenso anual desde 2018.
Una prohibición del fentanilo
Para Cauchon, presidente de un grupo de derechos humanos llamado Harm Reduction Ohio, sólo una cosa podría explicar el repentino y dramático descenso de las muertes por sobredosis de drogas en el estado: la prohibición criminal de la producción de fentanilo en un lugar clave para su fabricación en México.
«Pensé: ¿qué causa un descenso del 25% en un abrir y cerrar de ojos?», dijo a InSight Crime. «Algo distinto tuvo que haber ocurrido para que se produjera un cambio tan grande, repentino y sin precedentes en las muertes por sobredosis en Ohio».
Alrededor de junio de 2023, la facción de los Chapitos del Cartel de Sinaloa ordenó a todos los productores de fentanilo en Sinaloa a detener la producción de la droga. La medida llegó tras meses de creciente presión sobre el grupo. En enero de 2023, las autoridades mexicanas detuvieron a uno de los principales líderes de la facción, Ovidio Guzmán López, uno de los varios hijos de Joaquín Guzmán Loera, alias «El Chapo«, el antiguo jefe del Cartel de Sinaloa, quien está tras las rejas. En abril de 2023, la fiscalía federal estadounidense presentó nuevos cargos por narcotráfico contra Ovidio y sus hermanos.
Sin embargo, faltan datos para analizar con precisión el impacto de la prohibición en el mercado estadounidense. A principios de 2024, productores independientes de drogas dijeron a InSight Crime que la prohibición seguía en vigor. Pero el fentanilo se sigue produciendo en masa en México, y los productores afirmaron que la prohibición simplemente empujó la producción hacia la frontera entre Estados Unidos y México.
Los Chapitos no son la única facción criminal implicada en la producción y el tráfico de la droga sintética. Los funcionarios de aduanas estadounidenses incautaron más de 12 toneladas de fentanilo en diversas formas a lo largo de la frontera suroccidental en el año fiscal de 2023, según datos oficiales, casi el doble de la cantidad incautada en 2022. La pureza de ese fentanilo incautado también varía considerablemente, lo que sugiere la existencia de numerosos productores con amplias capacidades de producción.
«Si hubiera una reducción real de la oferta, lo veríamos en el precio ajustado a la pureza. Eso es lo que me gustaría analizar para tratar de averiguar si realmente se trata de un cambio en la oferta o de otra cosa», dijo Beau Kilmer, codirector del Centro de Investigación sobre Políticas de Drogas de RAND.
Una base de usuarios agotada
Las muertes por sobredosis causadas por el consumo de fentanilo han sido tan elevadas en los últimos años que es posible que actualmente haya menos consumidores de opioides.
«El fentanilo ha llegado a todo el país y ha tenido un número de víctimas mortales tan grande que tal vez se esté agotando o reduciendo el grupo de personas susceptibles de morir», afirmó Peter Reuter, experto en política de drogas y profesor de la Escuela de Políticas Públicas y del Departamento de Criminología de la Universidad de Maryland.
Pero los vendedores de droga intentan ampliar el mercado mezclando cada vez más el fentanilo con estimulantes como la cocaína y la metanfetamina. Un estudio reciente llevado a cabo por investigadores de la Universidad de California en Los Ángeles (UCLA) descubrió que un tercio de todas las muertes por sobredosis de fentanilo en Estados Unidos en 2021 implicaban fentanilo mezclado con un estimulante, predominantemente cocaína y metanfetamina, en comparación con casi la mitad de un uno por ciento en 2010.
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Los expertos afirman que cada vez es más difícil conocer con exactitud los mercados de drogas en Estados Unidos, específicamente desde que el gobierno federal recortó la financiación de los programas de vigilancia hace aproximadamente una década, justo cuando el fentanilo ilícito empezó a aparecer en Estados Unidos.
«Disponer de información sobre el número de personas que consumen, cuánto consumen y los precios, es una información realmente útil que podría ayudarnos a hacernos una idea más clara de lo que está ocurriendo en estos mercados y por qué estamos viendo reducciones en algunos lugares y aumentos en otros», dijo Kilmer.
Aumento de la tolerancia
Mientras que al principio los consumidores de drogas consumían fentanilo sin saberlo, ahora muchos usuarios saben que están consumiendo el opioide y lo están buscando directamente, lo que a su vez puede estar aumentando la tolerancia a la droga.
«Cada vez hay más pruebas de que las personas que consumen fentanilo con regularidad están consumiendo ahora mucho más que antes», afirmó Reuter.
También ha aumentado la cantidad de fentanilo que las autoridades envían para análisis, lo que puede apuntar a un mayor uso. Entre 2014 y 2022, el número de muestras de fentanilo enviadas al Sistema Nacional de Información de Laboratorios Forenses (National Forensic Laboratory Information System, NFLIS) de la Administración para el Control de Drogas (Drug Enforcement Administration, DEA) se disparó de solo 4.642 a 163.201.
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Una mayor disponibilidad también significa precios más bajos. El precio al por mayor de un kilogramo de fentanilo es una fracción de lo que era cuando el mercado despegó hace años, según los productores de drogas sintéticas con los que InSight Crime habló recientemente en Sinaloa. En muchas ciudades de Estados Unidos, los consumidores pueden comprar una pastilla falsificada de oxicodona mezclada con fentanilo ilícito –conocida como M30–, por menos de un dólar.
«Es tan pura y tan barata que la percepción es que, para muchos consumidores frecuentes, puede elevar sus niveles de tolerancia», dijo Kilmer a InSight Crime.
Crecen los servicios de tratamiento y reducción de daños
Los servicios de reducción de daños y los tratamientos para salvar vidas en caso de sobredosis, como la naloxona, se han generalizado en los últimos años, lo que también puede ser un factor que contribuya al ligero descenso de las muertes por sobredosis de drogas en todo el país.
Si bien las muertes por sobredosis pueden haber disminuido ligeramente a nivel nacional, no todos los estados de Estados Unidos experimentaron una disminución. Las muertes inducidas por drogas aumentaron más de un 20 % entre 2022 y 2023 en estados occidentales como Nevada, Oregón y Washington, pero se produjo un descenso de casi el 25 % en Nebraska durante ese periodo. Además, las muertes por sobredosis cayeron alrededor de un 15 % en Maine.
«Definitivamente ha habido un aumento en el acceso al tratamiento en algunos lugares, especialmente con respecto a los medicamentos para el trastorno por consumo de opioides», dijo Kilmer a InSight Crime. «Pero hay mucha variación. Algunos lugares ofrecen mejor acceso que otros».
Estas variaciones, unidas a la falta de datos, obligan a los expertos a especular sobre cómo la mejora de los sistemas de tratamiento y reducción de daños puede estar influyendo en las muertes por sobredosis. Para obtener una imagen precisa de las tendencias del consumo de drogas y del estado de los mercados de drogas en Estados Unidos, Kilmer afirmó que es esencial financiar programas de vigilancia y aprovechar los esfuerzos existentes para analizar las aguas residuales.
«Tenemos toda una red que está analizando aguas residuales para buscar distintas variantes de COVID-19. No sería difícil tomar una muestra adicional y analizarla en busca de diversas drogas», afirmó. «Puede ser una información realmente útil para los sistemas de alerta temprana».
Imagen principal: Empaques de Narcan, nombre comercial de la naloxona, medicamento utilizado para reversar sobredosis de opioides. Crédito: AP.