Digna Asusena Valle Valle fue por décadas la matriarca de los Valle, uno de los clanes familiares narcotraficantes más importantes de Honduras. Por años la familia estableció importantes redes criminales y políticas que los consolidaron como intermediarios clave en el trasiego de cocaína desde Colombia hacia Estados Unidos. Sin embargo, la captura de Digna Asusena en 2014 significó el comienzo del fin del emporio criminal de los Valle.
Historia
Digna Asusena —la mayor de los hermanos Valle— nació el 15 de diciembre de 1966 en el municipio de La Encarnación, departamento de Ocotepeque, al occidente de Honduras.
Antes de adentrarse en el narcotráfico, la familia Valle se dedicaba al robo de ganado y al contrabando de cigarrillos. Fue en los años 90 que la familia migró al tráfico de drogas, consolidándose como intermediarios claves en el envío de cocaína desde Colombia hacia Honduras, y desde allí a Guatemala, México y Estados Unidos.
El pico de su éxito llegaría a partir de 2009, cuando un golpe de Estado en Honduras dispuso las condiciones para que la cocaína fluyera por el país en medio del caos. A partir de entonces, los Valle se consolidaron en el envío de múltiples toneladas de cocaína hacia Estados Unidos.
Si bien sus hermanos Miguel Arnulfo y Luis Alonso eran los principales líderes de la organización criminal, Digna Asusena tenía un rol importante en las finanzas de la familia. Además de eso, fue una figura clave en el relacionamiento de los Valle con la comunidad de El Espíritu —un relacionamiento principalmente mediado por el dinero y el poder de las armas— y que fue clave en el establecimiento de un control social por parte de la familia.
Digna Asusena fue capturada el 20 de julio de 2014 en la ciudad de Miami, Estados Unidos. Tras eso, comenzó el declive de la familia. En agosto de ese año las autoridades incautaron más de 50 propiedades de la familia. En octubre de 2014 fueron capturados sus hermanos Miguel Arnulfo, Luis Alonso y José Inocencio, los cuales fueron posteriormente extraditados a Estados Unidos.
En febrero de 2015, Digna Asusena se declaró culpable de narcotráfico en Estados Unidos, con el fin de obtener una sentencia reducida. En julio de ese año fue condenada a 11 años y dos meses de cárcel, con cinco años de libertad condicional. En noviembre de 2018, salió de prisión luego de una rebaja de condena recibida al convertirse en testigo de las autoridades estadounidenses. En el marco de esta cooperación entregó información importante sobre los colaboradores de la red familiar para el narcotráfico y el lavado de activos. Desde entonces, reside en el estado de Texas, luego de que el gobierno de Estados Unidos aceptara su solicitud de asilo político.
Actividad criminal
Dentro de las actividades de su familia en el narcotráfico, Digna Asusena Valle tenía un rol importante como enlace con otros actores criminales, además de coordinar la logística de envíos de droga hacia Estados Unidos, Guatemala y México, y el despacho de dineros hacia Colombia.
Además de esto, tanto ella como el resto de su familia lavaban dinero producto del narcotráfico a través de empresas productoras de café, propiedades ganaderas, gimnasios, ferreterías, empresas de televisión por cable y hoteles.
Adicionalmente, la familia se apropió de cientos de hectáreas de tierra en la frontera con Guatemala, las cuales eran utilizadas para el narcotráfico.
Geografía
El centro de operaciones de Digna Asusena Valle y el resto de su familia era el departamento de Copán, al occidente de Honduras, fronterizo con Guatemala. Su influencia se concentró sobre todo en el pequeño pueblo de El Espíritu. Sin embargo, la influencia de la familia también se extendió hasta el departamento de Cortés, al noroccidente del país.
Aliados y enemigos
Las relaciones de Digna Asusena Valle y el resto de su familia se extendieron a poderosos criminales y políticos de Honduras y países cercanos como México. Uno de sus aliados clave fue Joaquín Guzmán Loera, conocido como “El Chapo” Guzmán, el máximo líder del Cartel de Sinaloa. De hecho, de acuerdo a testimonios de habitantes de El Espíritu, recogidos por investigaciones periodísticas, El Chapo solía frecuentar a la familia Valle en Honduras mientras evadía a la justicia, luego de escapar de la cárcel en 2001.
En una de esas visitas, en 2013, el Chapo se reunió con Antonio “Tony” Hernández, hermano del entonces candidato presidencial de Honduras, Juan Orlando Hernández. El encuentro se dio a través de Amilcar Ardón, el alcalde de El Paraíso, un pequeño pueblo de Honduras, quien luego testificó ante las cortes estadounidenses que el Chapo entregó altas sumas de dinero a la campaña de Hernández a cambio de protección para sus aliados hondureños, la familia Valle.
Sin embargo, el trato pareció romperse con la captura de Digna Asusena. Esto llevó a que algunos de los hermanos Valle intentaran atentar contra la vida de Juan Orlando Hernández, como venganza por la captura de su hermana.
Perspectivas
Tras la captura de Digna Asusena y los demás hermanos del Clan Valle, algunos de sus hijos presuntamente quedaron a cargo de los negocios criminales de la familia.
Al igual que Digna Asusena, algunos de sus hermanos ya han cumplido sus penas en Estados Unidos. Sin embargo, a diferencia de ella, han retornado a Honduras. Se trata de José Inocente Valle, el menor de los hermanos, quien después de cumplir una pena por narcotráfico en Estados Unidos regresó a Honduras en 2023, donde permanece libre.